Amor de las seis empunto
Recuerdo una primavera,
un bosque, una cascada,
muchos niños retozando,
un pasto verde, un cielo azul...
Recuerdo un bello arcoiris,
nubes blancas recostadas...
una llanura alborada,
muchas sabanas tendidas.
Recuerdo gritos de niñas
corriendo tras la pelota,
un perro, y una gaviota
rozando la faz del cielo.
Recuerdo un lindo lucero,
un pleno sol recostado,
la luna al otro costado:
una hermosa media luna,
una brillante laguna
ondeando con ecos suaves.
Revoloteaban las aves
por el ancho firmamento
los árboles con el viento
jugaban con gran delirio;
recuerdo en ese camino
la tenue luz de la tarde
conjugaba con el aire
y las hojas secas del suelo
gruñendo su desconsuelo.
Recuerdo una hermosa musa
de pantalón, linda blusa,
de figura escultural.
Recuerdo su dulce mirar
sus labios y su figura,
era tan bella y pura
como agua de manantial.
Esa tarde vagabunda
la trajo a mí sin buscarla.
Pude un instante amarla
pude sentir que era mía,
pero en su lejanía,
en su remoto mirar
se fue como ola del mar
dejando mi amor difunto.
De ese loco atardecer
recuerdo aquella mujer...
Amor de las seis empunto.
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